Aunque hace unos años, cuando comenzaron a darse los primeros pasos en la incorporación de la tecnología al sector del transporte, fue una medida polémica, hoy en día es casi imprescindible.
Mucho más alejado de lo que entonces se comentaba, los beneficios de conocer la ubicación en tiempo real de los vehículos que componen la flota de una compañía de transporte son claves para mejorar su productividad, tiempos y ahorrar costes.
¿Cómo? Basta echar un vistazo a varias situaciones para comprenderlo.
Ciudades mejor conectadas
Son muchas las ciudades que ya están aplicando las posibilidades del rastreo y seguimiento de flotas en el transporte público.
En aras de la digitalización y el concepto de la smartcity, se analizan los datos que emiten los vehículos para poder informar en las marquesinas y aplicaciones diseñadas a tal efecto a los ciudadanos para que sepan cuándo se espera que pase el siguiente vehículo.
Pero también permite a los Ayuntamientos verificar si todo funciona de forma correcta, conociendo en cada momento dónde están los vehículos, si están sufriendo cualquier tipo de retención de tráfico, si hay una situación de emergencia o si el conductor está cuidando las normas viales.
Seguimiento de pedidos
En las empresas de transporte y paquetería este adelanto ha sido clave para poder ofrecer tanto a los destinatarios como a los remitentes información en tiempo real de dónde se encuentra la carga.
En un mundo donde cada vez se usa más el e-commerce para las compras rutinarias, disponer de información en tiempo real garantiza que los tiempos de recepción se conocen. Además, desde las empresas, permite saber el tiempo que tardan de verdad los repartidores en gestionar los envíos del día en rutas planificadas, lo que les permite ajustar los tiempos para dar previsiones mucho más realistas y evitar que tengan que ir a una velocidad mayor o con un estrés añadido.
Rutas por carretera
En el caso de empresas cuyos transportes no son de cercanía sino en rutas para llevar mercancías a puntos lejanos, es clave contar con ayudas en la conducción para que, quienes van al volante, dispongan de una serie de datos que les ayude junto con la organización a tomar decisiones en tiempo real.
Gracias a este tipo de seguimiento de flotas se ha conseguido alterar rutas para evitar situaciones de peligro por condiciones de tiempo adversas, avisar al conductor de que está superando el número de kilómetros o tiempo de conducción y sería recomendable que hiciera una parada de descanso o, incluso, en casos extremos, avisarle de que va a una velocidad que no se corresponde con la regulación de la vía.
Transporte de productos especiales
Cada vez el comercio internacional demanda de más transporte para productos frescos o, incluso, para piezas de arte que van a ser expuestas en una exposición temporal. Son dos casos antagónicos pero que sirven de ejemplo para ver las virtudes del rastreo vía GPS.
Al margen de conocer en tiempo real dónde está el vehículo con la carga, se consigue también dar un seguimiento a la temperatura de la caja de transporte, garantizando en el caso de la alimentación la custodia de la cadena de frío y, en el caso del arte, una temperatura estable que garantice su perfecta conservación.
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