"No hay a quien le duela más la muerte de un soldado que a los que portamos el camuflado y, por supuesto, a sus familias y a la patria misma, pero su sacrificio supremo por el país no debería ser usado en narrativas de campaña política".
Eduardo Enrique Zapateiro Altamiranda es general del Ejército Nacional de Colombia. El 27 de diciembre de 2019 fue designado por el presidente Iván Duque Márquez como comandante del Ejército Nacional de Colombia sucediendo al general Nicacio Martínez Espinel.
Eduardo Zapateiro representa al sector conservador de las Fuerzas Armadas de Colombia. De forma sorpresiva rompió su silencio para irrumpir en la camapaña electoral con un contundente mensaje en la red de Twitter a Gustavo Petro, líder del Pacto Histórico. Le respondió en la polémica sobre las supuestas conexiones de mandos militares con el llamado clan del Golfo.
Petro mantiene una relación tensa con el Ejército por su pasado guerrillero y por mantener una postura muy crítica con operaciones militares como la de hace unas semanas en el Putumayo, en la que murieron civiles en circunstancias sospechosas.
Hace días, Zapateiro tuiteó un mensaje por la muerte de seis soldados en un atentado cometido por el clan del Golfo, una organización criminal dedicada al narcotráfico. Petro utilizó ese mensaje para decir que algunos generales "están en nómina" del clan.
"La cúpula se corrompe cuando son los politiqueros del narcotráfico los que terminan ascendiendo a los generales", señaló.
Zapateiro ha acusado a Petro de aprovechar la muerte de los soldados para hacer campaña y le recordó que desde 2001 han sido más de 500 los militares asesinados o heridos en el cumplimiento de misiones. Y lo invitó a denunciar ante la fiscalía a los generales corrompidos a los que se refirió.
Esta polémica es muy delicada en Colombia. No sucede un choque así desde la presidencia de Ernesto Samper (1994-1998).