El miércoles por la tarde, en el Congreso de los Diputados, Mariano Rajoy mostró un enorme cansancio. Una imagen desconocida en él. Justo cuando acababa de lograr uno de los mayores éxitos en la historia de la democracia. Lograr por segundo año consecutivo un apoyo de 176 diputados. siendo un Gobierno en minoría, para los Presupuestos.
Pero ya el miércoles por la tarde, como se confirmó este viernes, Mariano Rajoy pudo tener un primer avance del terremoto que supondría la sentencia Gürtel condenando a Luis Bárcenas (33 años y 4 meses), su mujer Rosalía Iglesias (15 años y 1 mes), Francisco Correa (51 años y 11 meses), y Pablo Crespo (37 años y 6 meses), siendo absuelto El Bigores. El tribunal constató que Francisco Correa y los políticos crearon un "eficaz sistema de corrupción instiutucional".
El escenario bien pronto se dibujó:
1. Pedro Sánchez con la jugada de una moción de censura para retratar a Albert Rivera.
2. Mariano Rajoy preparándose para resistor con el partido bajo depresión.
Atención a las estrategias en torno a la moción de censura. Pedro Sánchez juega con dos cartas que dice son seguras:
a) La hipótesis del apoyo de PNV:
PSOE + Unidos Podemos + ERC + CDC + PNV + Bildu (180 escaños)
b) La hipótesis del apoyo de Ciudadanos:
PSOE + Unidos Podemos + Ciudadanos (188 escaños)
Al escenario de doble moción de censura, los anuncios de los planes de Albert Rivera y de Pedro Sánchez, Mariano Rajoy contestó tras el Consejo de Ministros.
Acusó al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, de perjudicar la estabilidad de España y debilitar al país al promocionar una moción de censura en plena aplicación del artículo 155 en Cataluña, con los Presupuestos recién aprobados y con el apoyo de los partidos independentistas y de Podemos.
Aseguró que no hay razones para intentar tumbar a su Gobierno. Y rechazó que la sentencia del caso Gürtel, que pone en duda su credibilidad como testigo, sea razón suficiente para impulsar la votación.
Atribuyó a los intereses personales de Pedro Sánchez que haya registrado en el Congreso de los Diputados la moción de censura. Evitó polemizar con Ciudadanos, que le pide un adelanto electoral.
"La moción se produce también en una situación de debilidad, de dificultad para España, con la aplicación del artículo 155”, dijo Mariano Rajoy en La Moncloa. “Va contra la estabilidad, tan necesaria hoy; perjudica la recuperación económica, basta con ver cómo está evolucionando la Bolsa y la prima de riesgo; es mala para España, y es lesiva para el futuro de todos los ciudadanos”, advirtió.
"La moción se hace en el único interés del señor Sánchez, que perdió las elecciones de 2015 y de 2016, y dejó a su partido en 84 escaños, la cifra más baja del PSOE desde las primeras elecciones celebradas en nuestro país", precisó el presidente del Gobierno.
"El objetivo es que Sánchez sea presidente a cualquier precio y con quien sea", sentenció. "Sánchez tiene dos opciones: pactar con Ciudadanos y Podemos a la vez o pactar con ERC, con el PDeCAT del señor Puigdemont y el señor Torra, con Bildu y con Compromis", analizó. "Como es comprensible, cualquier gobierno con estos apoyos es inviable, el señor Sánchez lo sabe, pero a él le da igual", dijo Mariano Rajoy en duro ataque al secretario general del PSOE.
Respecto al presidente de Ciudadanos, aseguró que "el presidente del Gobierno tiene dos facultades exclusivas: disolver las Cámaras y nombrar ministros". "No conozco a ningún presidente del Gobierno que esté dispuesto a renunciar a ellas", subrayó Mariano Rajoy antes del comienzo de un fin de semana de alto voltaje con incógnitas profundas sobre el futuro inmediato de la legislatura.
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