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Fugaz escándalo y suave desenfreno en el estreno de "50 sombras de Grey"
No fue para tanto el estreno en la Berlinale que dejó con la boca abierta a muchos que tuvieron la oportunidad de ver a Jamie Dornan y Dakota Johnson en plena acción sexual.
Primer encuentro con el público europeo de 50 sombras de Grey. En esta ocasión fue Berlín quién acogió la primera proyección de la esperada adaptación cinematográfica de la historia de amor, deseo, dominación y entrega escrita por E.L. James. La película que se convirtió desde hace meses en uno de los eventos más esperados, generó una gran expectación.
Hay que recordar que tan solo en España donde se presentará el próximo viernes 13 de febrero, lleva hasta ahora más de 170.000 entradas vendidas, y lo mismo ocurre en otros países de Europa. Aunque las especulaciones sobre si iba a ser demasiado suave o por el contrario totalmente explícita no se hicieron esperar en la Berlinale.
La cinta se promociona desde hace meses prácticamente sola en las redes sociales y la Berlinale, que la incluyó en su sección especial, fuera de competición, ni programó una rueda de prensa con sus protagonistas, Jamie Dornan y Dakota Johnson, presentes en la capital alemana para desfilar por la alfombra roja.
Los periodistas acreditados al Festival mostraron sus opiniones totalmente divididas ante una película considerada por unos un clásico filme romántico de la factoría Hollywood y por otros una película erótica apta para la mayoría de los públicos. “¿Tanto revuelo para esto?", fueron lo que muchos críticos de cine expresaron ante los miles de lectores que esperaban reseñas totalmente positivas.
Hay que recordar que la película, inspirada en el primer volumen de la trilogía de E.L. James, había obtenido la calificación "R" en Estados Unidos. Y eso significa que, pese a incluir contenido para adultos, que los menores de 17 años podrán verla siempre y cuando estén acompañados de sus padres.
En torno a esa edad tenían algunas de las adolescentes que desde primera hora de la mañana hacían cola frente al Zoo Palast de Berlín para ver en carne y hueso a Christian Grey y Anastasia Steele, los personajes principales de 50 sombras de Grey. Y es que el norirlandés Jamie Dornan y la estadounidense Dakota Johnson solo están aquí para sus fans.
En aproximadamente dos horas, la hija de Melanie Griffith y Don Johnson se mete en la piel de la joven Anastasia una estudiante de Filología inglesa que, por hacerle un favor a una amiga, acaba entrevistando al atractivo y multimillonario empresario Christian Grey. Como es de esperar, y en toda historia romántica, el flechazo es inmediato.
"El romance no es lo mío. Y tengo unos gustos muy especiales", advierte a la inexperta Ana antes de seguir conquistándola con frases como "Yo no hago el amor. Yo follo. Duro". Finalmente le muestra su secreto: su sala de juegos, donde la inicia en un viaje que la joven no está segura de querer emprender.
Así, y como se había anunciado, se ve mucha piel desnuda, sí, pero la cineasta apuesta más por el erotismo de lo que no se muestra que por el sexo salvaje y sadomasoquista del libro. Grey despliega ante los ojos de una asustada Anastasia su colección de "juguetes", pero en la práctica, todo resulta "muy light", tal y como relataron los periodistas.
A muchos les sorprendió los apenas once minutos, cronometrados por varios críticos, de escenas de sexo y la suavidad de muchas de las imágenes. Asimismo, también es llamativo el uso excesivo de palabras por encima de las tomas en movimiento, en una película de dos horas en la que la primera escena de sexo llega pasado el minuto cuarenta.
No obstante, y pese a la decepción de muchos críticos y espectadores, los medios resaltaron el buen hacer de los dos protagonistas, sobre todo el de la interpretación de Dakota Johnson. Las críticas concluyen que más que un relato sadomasoquista es una historia totalmente romántica poco parecida a la del libro.