Gran atención en México y en el Caribe -República Dominicana y Puerto Rico- a las nuevas tendencias electorales en Estados Unidos. Con un 73% de los apoyos frente a un 19,7%, Alexandria Ocasio-Cortez se impuso a Michelle Caruso-Cabrera, periodista de la cadena CNBC, nieta de inmigrantes italianos y cubanos,
Alexandria mostró su fortaleza en Nueva York y la frescura del ala avanzada del Partido Demócrata. La congresista de origen puertorriqueño logró casi el 70% de los votos frente a su principal oponente, la expresentadora de televisión Michelle Caruso-Cabrera.
"Cuando gané en 2018, muchos desestimaron nuestra victoria calificándola de casualidad. Nuestra victoria fue tratada como una aberración o porque nuestro oponente no lo intentó. Esta noche estamos demostrando que el movimiento del pueblo en Nueva York no es un accidente, es un mandato", el hilo de Alexandria Ocasio-Cortez en Twitter.
La victoria de Alexandria coincide con la nueva encuesta de The New York Times y la irrupción de Barack Obama. Joe Biden del Partido Demócrata aventaja en 14 puntos al Donald Trump, el presidente y candidato in pectore del Partido Republicano. Biden avanza con el 50% de apoyo frebte al 36% de Trump.
Otras encuestas le conceden 10 puntos de ventaja a Biden, exvicepresidente y virtual candidato de la oposición demócrata. Biden tiene, según el sondeo, un apoyo sólido entre las mujeres, afroestadounidenses y latinos.
También está casi igualado con Trump entre los votantes hombres, blancos y gente de mediana edad o mayores, cuyo apoyo permitió al candidato republicano ganar los comicios de 2016, según la encuesta. The New York Times apuntó que Trump pierde apoyo debido a su respuesta a la crisis del coronavirus que asestó un duro golpe hasta la hasta entonces sólida economía de Estados Unidos.
Sin duda Trump también está pagando el precio de su postura de "ley y orden" ante las manifestaciones contra el racismo y la brutalidad y policial.
La encuesta es importante porque apuntó que el apoyo a Trump cae en el segmento de blancos y graduados universitarios que tienden a votar a los republicanos. En la Casa Blanca, ante estos sondeos, insisten en que Hillary Clinton lideró las encuestas a lo largo de la campaña y terminó perdiendo la elección. Pero el escenario es radicalmente diferente esta vez.
Atención también a los nuevos factores. Barack Obama está además entrado en tromba. El virtual candidato del Partido Demócrta no pertenece a las élites de la costa este. Tiene la capacidad de unir a las bases tradicionales del partido y a sus dos tendencias. Está en juego no solo derribar a un rival sino recuperar el prestigio del país y la autoridad moral de la Casa Blanca. Podría ser al final un factor decisivo.
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